CONAPINA

ACNUR reconoce la labor del CONAPINA en favor de la niñez y adolescencia en condición de desplazamiento forzado

La representante de ACNUR en El Salvador, Mónica Cándido, reconoció el trabajo articulado que el CONAPINA realiza en comunidades que anteriormente eran afectadas por la violencia, y que ahora ha permitido velar por la protección integral de los derechos de la niñez y adolescencia salvadoreña, particularmente aquellos en situación de vulnerabilidad debido al desplazamiento forzado. 

«Las alianzas estratégicas entre el Gobierno y organismos internacionales es muy importante para asegurar que la niñez pueda ser asistida desde distintos ángulos. También creemos que es muy importante la colaboración con las municipalidades y alcaldías, que es lo que se está haciendo en esas comunidades que fueron afectadas por la violencia”, afirmó Cándido, destacando la importancia de la colaboración entre ACNUR y CONAPINA.

Actualmente, CONAPINA con el apoyo de ACNUR desarrolla un proyecto en las comunidades de La Campanera, Las Margaritas y Tutunichapa de San Salvador. Esta iniciativa se enfoca en brindar atención psicosocial a niñas, niños, adolescentes y sus familias afectadas por el desplazamiento forzado. 

Hasta la fecha, han proporcionado más de 800 atenciones a niñas, niños, adolescentes y adultos en estas comunidades. Este logro demuestra el impacto tangible que la colaboración entre ACNUR y CONAPINA está teniendo en la vida de las familias afectadas por el desplazamiento forzado, especialmente en aquellas comunidades que en el pasado fueron asediadas por la violencia.

El apoyo de ACNUR ha permitido financiar acciones que han mejorado la calidad de vida de las familias de dichas comunidades. Por su parte, el CONAPINA ha identificado necesidades, casos específicos y factores de riesgo a través de un censo realizado a las familias que habitan en esos lugares. 

Cándido reafirmó el compromiso de ACNUR con el CONAPINA por continuar desarrollando proyectos con un impacto positivo en la niñez, adolescencia y sus familias en El Salvador. 

Las declaraciones fueron dadas durante una firma de Carta de Entendimiento entre ambas instituciones, en la que formalizaron nuevamente su dedicación por trabajar por la niñez y adolescencia víctima de desplazamiento forzado en el país.